Centenario Roberto Lotina
12 años 5 meses antes - 12 años 5 meses antes #47429
por CHELO
Respuesta de CHELO sobre el tema Re: Centenario Roberto Lotina
precisamente he leído esta mañana el articulo y había algún párrafo que también quería compartir.
Fue en el restaurante Perana, «un clásico de toda la vida -evoca Ana María-, Roberto y un grupo de amigos le habían llevado a Serafina, la cocinera, lo que habían pescado ese día». En la mesa de al lado unos conocidos habían hecho lo propio con una cesta de setas. Se iban intercambiando las viandas, pero él se negó a probar las setas por aprensión. Hizo bien, pues esa misma tarde todos cayeron enfermos. Desde entonces, aprovechando sus conocimientos de botánica, empezó a cultivar el estudio de la micología hasta convertirse en toda una autoridad.
Curioso y precavido comienzo no?? Ese creo que fué el mejor consejo que nos dejó: NO COMER HASTA ESTUDIAR
Estudioso incansable -«pasaba horas en la rebotica con sus libros»-, en los 70 se decidió a poner por escrito sus conocimientos sobre micología y biología marina. Fruto de aquel esfuerzo son obras como la Guía Micológica del País Vasco, Las Setas de Bizkaia, Mil Setas Ibéricas o la ingente Peces de Mar y de Río en cuatro tomos, que continúa siendo obra de referencia en las facultades de Biología. Todas ellas dedicadas a su querida Mirentxu,
«copiloto en las singladuras de nuestras vidas».
Así mismo es curiosa la dedicatoria en todos sus libros ya que casi todos los seteros tienen a su lado algún "copiloto" que en muchos casos es mas bien un "sufridor" (tanto en masculino como en femenino)
Fue en el restaurante Perana, «un clásico de toda la vida -evoca Ana María-, Roberto y un grupo de amigos le habían llevado a Serafina, la cocinera, lo que habían pescado ese día». En la mesa de al lado unos conocidos habían hecho lo propio con una cesta de setas. Se iban intercambiando las viandas, pero él se negó a probar las setas por aprensión. Hizo bien, pues esa misma tarde todos cayeron enfermos. Desde entonces, aprovechando sus conocimientos de botánica, empezó a cultivar el estudio de la micología hasta convertirse en toda una autoridad.
Curioso y precavido comienzo no?? Ese creo que fué el mejor consejo que nos dejó: NO COMER HASTA ESTUDIAR
Estudioso incansable -«pasaba horas en la rebotica con sus libros»-, en los 70 se decidió a poner por escrito sus conocimientos sobre micología y biología marina. Fruto de aquel esfuerzo son obras como la Guía Micológica del País Vasco, Las Setas de Bizkaia, Mil Setas Ibéricas o la ingente Peces de Mar y de Río en cuatro tomos, que continúa siendo obra de referencia en las facultades de Biología. Todas ellas dedicadas a su querida Mirentxu,
«copiloto en las singladuras de nuestras vidas».
Así mismo es curiosa la dedicatoria en todos sus libros ya que casi todos los seteros tienen a su lado algún "copiloto" que en muchos casos es mas bien un "sufridor" (tanto en masculino como en femenino)
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